Si está buscando un juego de cartas emocionante que combine una estrategia con una pizca de rivalidad, Spite & Malice es el juego de paciencia competitivo perfecto para dos jugadores. Cada jugador comienza con una mano de 5 cartas, una pila de pagos de 20 cartas y 4 pilas laterales vacías. En el centro de la mesa, encontrará 3 pilas centrales vacías y la pila de caldo, lo que contiene las cartas restantes.
El objetivo final? ¡Sé el primero en vaciar tu pila de pago y superar a tu oponente! Las pilas centrales están construidas desde el Ace hacia arriba, independientemente de su traje. Imagine comenzar con el as de diamantes, luego transición suavemente a las dos espadas, seguido de los tres de los corazones, y así sucesivamente. Aquí es donde se pone interesante: ¡los reyes son comodines! Cuando juegas a un rey, se transforma mágicamente en la carta necesaria para continuar la secuencia. Por ejemplo, si coloca al rey de las espadas en diez de los clubes, se transforma en una reina.
Una vez que una pila central llega a su finalización (al limitarlo con una reina o rey en un gato), se arrastra de nuevo en la pila de existencias. Las pilas laterales? Son sus zonas flexibles donde puede colocar cualquier tarjeta, pero recuerde, solo la tarjeta superior es accesible para el juego.
Al comienzo de su turno, extraerá de la pila de stock para reponer su mano a 5 cartas. Durante su turno, tiene varios movimientos estratégicos a su disposición:
- Juega la carta superior de su pila de pago en una de las pilas centrales.
- Use la tarjeta superior de una de sus pilas laterales para avanzar en una pila central.
- Implemente una tarjeta de su mano directamente en una pila central.
- Coloque una tarjeta de su mano en una de sus pilas laterales, lo que concluirá su turno.
El juego alcanza su clímax cuando un jugador juega con éxito su última carta desde la pila de pago en una pila central, declarando la victoria. El ganador gana puntos equivalentes a la cantidad de cartas que quedan en la pila de pago de su oponente. Sin embargo, si la pila de existencias se seca antes de que alguien gane, el juego termina en un empate sin puntos otorgados.
¡El primer jugador en acumular 50 puntos reclama el partido, haciendo que el rencor y la malicia no solo una prueba de paciencia, sino una batalla de ingenio y estrategia!