El rechazo de la Corte Suprema de los Estados Unidos de la apelación de Tiktok allana el camino para una prohibición nacional, que comenzará el domingo 19 de enero. El tribunal desestimó por unanimidad el desafío de la Primera Enmienda de Tiktok, citando la escala de la plataforma, la susceptibilidad a la influencia extranjera y la amplia recopilación de datos como justificar la prohibición para abordar las preocupaciones de seguridad nacional. Si bien reconoció la importancia de Tiktok para millones de usuarios estadounidenses, los jueces confirmaron la determinación del Congreso de que la desinversión es necesaria.
Sin intervención política, Tiktok se cerrará efectivamente el domingo. La preferencia del presidente Biden es que Tiktok permanezca disponible bajo la propiedad estadounidense, pero la implementación recae en la administración entrante de Trump.
El fallo de la Corte Suprema enfatiza las preocupaciones del Congreso sobre las prácticas de datos de Tiktok y su relación con un adversario extranjero. Sin embargo, el presidente electo Trump, quien previamente se ha opuesto a una prohibición completa, podría emitir una orden ejecutiva que retrase la aplicación de 60 a 90 días. Los informes sugieren que ya está discutiendo el asunto con el presidente Xi Jinping.
La posibilidad de una venta a una entidad occidental sigue siendo incierta, aunque los informes indican una adquisición completa se está considerando. Según los informes, Elon Musk, involucrado con la administración entrante, está actuando como un posible intermediario para los compradores interesados, o incluso puede buscar la adquisición él mismo.
En anticipación de la prohibición, muchos usuarios de Tiktok han migrado a la aplicación china similar, Red Note (Xiaohongshu), con informes que muestran un aumento significativo en los nuevos usuarios.
El futuro de Tiktok en los Estados Unidos depende de una venta exitosa o en el cese de las operaciones, a menos que la administración Trump interviene con una orden ejecutiva.